Queridas y queridos lectoras y lectores. Hoy es un día especial para mi, porque estoy celebrando un día mas de vida en El Señor y en la vida que El me ha dado.
Me he esforzado en hacer todo para la Gloria de Dios, no importando las circunstancias. Por la Gracia de Dios soy lo que soy.
Doy gracias a Dios por su misericordia y por como me ha acompañado y dirigido en toda mi vida. Es un Honor ser hija del Creador y tener como Rey al Único Rey de Reyes, El Señor Jesucristo Doy gracias porque no he perdido mi identidad a pesar de las pruebas. Como Educadora Especializada, como Consejera Certificada, como Profesional en Finanzas y Metodología y tener mas 35 anos de experiencia en Educación, tato Cristiana como Secular, no he perdido mi identidad y ha sido Dios que me ha sostenido y me ha guiado a servir en el Ministerio y en lo Secular sirviendo a la Sociedad y a las Naciones.
En el día de hoy quiero publicar por tercera vez este mensaje "No es mi Responsabilidad Cambiar el Mundo". Lo he estado publicando desde el 2021 y He sufrido muchos ultrajes por seis familias de ricos opresores y sigo orando a Dios que El haga su justicia. Tengo fe y permanezco en El. He sufrido mucho y es mi oración que Dios me haga justicia y me ayude a permanecer fiel en sus caminos sirviendo en mi entorno, haciendo la obra de Dios y sirviendo a otros. Dios tenga misericordia. No tengo enemigos, no soy enemiga, pero que Dios me libre y me guarde de enemigos ocultos sin razón de ser.
Hacer tu trabajo tiene poco que ver con tener
la razón, y mucho con tener humildad.
Amadas hermanas y amigas, queridas lectoras.
La Soberana Gracia de Dios sea con sus vidas.
Desde el 2013, luego de haber formado un
FORUM de seis o siete personas, para trabajar temas de interés nacional e
internacional, para ayudar a la sociedad y por supuestos a las familias y de
algún modo servir y apoyar el ministerio, con gran lucha en mi alma, por mi don
de servicio, renuncie a ser parte de servir para cambiar el mundo, tomando en consideración algunas desventajas y malos manejos de falta de honor. Pero siempre orando para que Dios El Creador obre según Su Voluntad. Muchas veces
nos acoge ese sentir, pero la mayoría de veces nos es perjudicial. Pero debemos
tomar la decisión de cambiar nuestro mundo, cambiando y aportando en nuestro
entorno y cambiando nosotras mismas para ayudar y servir mejor y sobre todo,
buscar la Gloria de Dios
Al publicar este estudio quiero reconocer a
John Vanden Oever, de Ministerios en Contacto, ha sido tan alentador saber que
Dios ha hablado a mi vida para confortarme y veo su consejo a través de las
Citas Bíblicas y este mensaje publicado que se y espero sea de gran bendición
para tu vida.
Estoy confiada de que tome la mejor decisión
de centrarme en Dios, centrarme en mi persona y entorno para servir mejor y
centrarme en lo mío para no meterme en problemas y servir desde mi plataforma
laboral y ministerial, ayudando paso a paso.
No me gustan los conflictos nacionales ni
internacionales, procuro la paz, puedo dar alguna consejería presencial, pagada
o como aporte, de acuerdo a ciertos análisis y solicitudes, pero siempre
procurando el bien de los demás y la Gloria de Dios. Centrada en mi entorno.
Lejos del chisme, murmuración, discusiones no sanas y sin discordias. No estoy
con la raza negra vulgar, no soy racista, pero prefiero tener mis preferencias
de personas conservadoras y formales. Soy centrada en la verdad. Trato de no
hacer acepción de personas, pero mantengo mis preferencias personales.
Al principio para el FORUM, no conté con el
apoyo de protección requerido, ore, ayune y tome la decisión de no servir de
esa manera. Fui objeto de engaño, malversación de fondos, ultraje en exceso, de
robo y jaqueo de mis cuentas por formar ese FORUM, Nacional e Internacional. Ha
sido tan difícil salir de esta situación, pero estoy orando y tomando medidas
en fe para salir y ser de bendición de otra manera normal. RENUNCIE
INMEDIATAMENTE A LA MESA DEL FORUM PARA AYUDAR y deje eso en las manos de Dios
para que el gobierno se encarga, cada gobierno y que las gerencias de la
sociedad puedan trabajar bajo el cargo de la responsabilidad de cada empresario
dueño. Oro que cada persona sea responsable de si misma, de su trabajo de sus funciones, cada iglesia sea responsable de su ministerio, que los lideres asuman su rol sin robar identidades, que los profesionales asuman su rol sin robar identidades.
Cuento con mi mesa de trabajo con ciertos
proyectos laborales en curso de inicio y también una parte ministerial, donde
sirvo a mujeres de todas las edades y sigo escribiendo y publicando y es mi
oración y deseo solamente trabajar en mi entorno y en privado en mis
consejerías y consultorías. Amo el ministerio de Dios y quiero estar centrado
en mi entorno, en lo mío, como dice John Vanden.
Muchas veces, dice John Vanden Oever, solía
tenerlo todo resuelto y yo también era así. Si me preguntaban cómo criar a los
hijos, cómo votar, cómo interpretar la Biblia, cómo resolver la crisis política
y cultural, tendría un consejo bueno y fundamentado. El problema es que los
creyentes en Jesucristo nunca estuvieron destinados a ser Lucy Van Pelt, el
personaje mandón de la tira cómica Snoopy, instalada detrás de nuestra cabina
de “Ayuda Psiquiátrica”, esperando resolver los males de la sociedad. Más bien,
debemos dedicarnos a hacer el bien. Y si sufrimos por ello, será para dar razón
de nuestra esperanza (cf. 1 Pedro 3.15).
Esta esperanza no parecerá
lógica a los no creyentes, ni tampoco se la considerará un buen consejo, porque
nuestra fe se centra en cosas que no se ven. “La esperanza que se ve, no es
esperanza”, escribe Pablo. “¿Por qué lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo?”
(Romanos 8:24). Pero la fe abraza a un poderoso Salvador que se hizo débil para
asegurar nuestra libertad. Si parecemos extraños al mundo, y si nuestras
perspectivas y maneras parecen raras, no debemos sorprendernos. El mundo no
llegará a nuestra puerta en busca de discernimiento; y de hecho, si lo
escuchan, podrían decidir odiarnos.
Por ello he tomado la
decisión de reformar mis hábitos. Estoy cerrando mi mesa de juego y deshaciendo
mi cartel que dice: “El médico está aquí”. Aunque nunca dejaré de buscar una
perspectiva bíblica sobre todos los desafíos de la vida y los males de la
sociedad, mi propósito en Dios no es cambiar las opiniones de los demás, sino
estar listo para compartir la esperanza de Cristo. La Biblia nos recuerda:
“¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian
buenas nuevas!” (Romanos 10.15).
En medio de mi lucha
interior por la crisis en nuestra cultura, que pide a gritos respuestas,
redescubrí un maravilloso encargo de la primera epístola de Pablo a los
Tesalonicenses:
“Procuren vivir tranquilos
y ocupados en sus propios asuntos, trabajando con sus manos como les hemos
encargado, para que los respeten los de fuera y ustedes no tengan que depender
de nadie” (1 Tesalonicenses 4.11,12 DHH).
Este es el consejo del
apóstol a una iglesia que quizás estaba tan afanosa como nosotros por la vida y
nuestro lugar en el mundo. Tesalónica era una gran área metropolitana, un
centro de comercio y comunicaciones, y de una cultura pluralista, donde
confluían innumerables expresiones de creencias y prácticas. Aunque era
tentador responder, Pablo llamó a sus contemporáneos a tener una vida de
quietud.
Aunque nunca dejaré de
buscar una perspectiva bíblica sobre todos los desafíos de la vida y los males
de la sociedad, mi propósito en Dios no es cambiar las opiniones de los demás,
sino estar listo para compartir la esperanza de Cristo.
Para el cristiano del siglo XXI, esta quietud nos
llama a estar menos sintonizados con el ruido de hoy; a ser más reflexivos. Se
necesita práctica para entrenar nuestros corazones hacia el reino de Dios. En
realidad, cuando estoy más conectado con los ruidosos puntos de vista del
mundo, me siento menos preparado para lidiar con las necesidades reales de mi
vida y las de mi comunidad.
Cuando Pablo dice que
debemos ocuparnos de nuestros propios asuntos, lo que sugiere es
que mantengamos nuestra visión centrada en las personas que están cerca,
creando amistades más firmes, donde la gracia trascienda las opiniones. Pablo
también exhorta a la fidelidad, diligencia y productividad, porque estos
hábitos centran nuestro enfoque en lo que está justo por delante. La promesa
aquí es que, con humildad, nuestras actividades revelarán, sin así
planificarlo, nuestra esperanza y atraerán nuevas interacciones con nuestros
semejantes. En vez de esforzarnos por reformar el mundo que nos rodea, la
Biblia nos recuerda una y otra vez que debemos ser imitadores de Dios. No como
caricaturas, sino como hijos amados, atraídos de manera natural por el Padre
confortador que se sacrifica por ellos.
En contraste con la
rectitud que tratamos de proyectar, a lo que el Señor Jesús nos llama es a la
cruz. A través de la entrega, se nos da la mayor fuerza, el poder mismo de
Cristo para que actúe en nosotros. No se trata de una vida ordinaria, sino de
una vida atípica, apartada y llamada como un vaso para honra, santificado y
útil para el Señor (2 Timoteo 2.21). Solo su poder nos transforma a usted y a
mí; entonces, ¿por qué en nuestra fuerza y locura humanas imaginamos que somos
capaces de reformar a los demás?
En vez de esforzarnos por
reformar el mundo que nos rodea, la Biblia nos recuerda una y otra vez que
debemos ser imitadores de Dios.
Si he dejado de ser como Lucy, tal vez es
hora de que adopte el estilo de su hermanito Linus. Callado, ocupándose de sus
propios asuntos, escribiendo sus cartas, esperando con esperanza la Gran
Calabaza. A menudo se le puede encontrar apoyado en sus codos, escuchando los
problemas de un amigo. Y, sí, se sabía que Linus exageraba en sus
disertaciones, pero por otra parte nadie es perfecto.
Evelyn
Calcaño Cepeda
Republica
Dominicana
Consultora Educativa, M. Ed.
Consejera Bíblica Certificada
Con Mayordomía Financiera y
Liderazgo Económico
Master en Docencia y Gerencia
Universitaria
Certificada en Teología
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