Amadas lectoras, amigas y hermanas, estamos llevando a cabo en estos días un mes de oración por nosotras, por nuestras familias, por nuestra nación, por sanidad, provisión y protección. También por sabiduría para saber la voluntad de Dios para nuestras vidas en este tiempo.
Quiero que veamos en las Escrituras la
siguiente Cita Bíblica y que oremos antes de iniciar a leer este breve estudio.
“Sed también vosotros pacientes;
fortaleced vuestros corazones, porque la venida del Señor está cerca.” Santiago
5:8
Veamos ¿Qué es la paciencia? La
paciencia es la capacidad de tolerar atrasos, problemas o sufrimientos sin
molestarse. La Biblia tiene mucho que decir acerca de aprender a ser pacientes -
es un fruto del Espíritu que Dios desea fuertemente que sus hijos tengan. La
paciencia requiere de fortaleza. Cuando somos presionados, este don del
Espíritu Santo es producto de nuestra sumisión cooperativa a su autoridad. Los
corazones establecidos en la verdad de Dios nos otorgan la gracia necesaria
para ser pacientes. Santiago 5:8 conecta la idea de un corazón establecido y la
paciencia cuando dice, “Sé paciente, fortalece tu corazón, para la venida del
Señor”, para que estés preparada para tu partida a la presencia del Señor y
para cualquier situación, se paciente y oramos para mantenernos en oración.
Cómo Fortalecer tu Corazón
y Construir la Paciencia en el Proceso.
Una de las versiones de Santiago 5:8 nos dice que “fortalezcamos, afirmemos
nuestros corazones”. La palabra griega para la fortaleza es sterixo, que
significa a su vez hacer espacio o estabilidad firmemente. El corazón es el
centro de nuestro ser. La palabra de Dios debe ser la base firme del corazón de
nuestras almas. Cuando lo es, esta perspectiva nos hace ser pacientes. Un
compromiso de leer las Escrituras es la prioridad más alta para alcanzar una
funcionalidad espiritual saludable.
No podemos esperar tener el don espiritual de la paciencia cuando no hemos
trabajado la Palabra de Dios en nuestra mente y en nuestras vidas. No puedo
correr un maratón luego de sentarme en el sofá y comer helado por dos años.
Tampoco puedo experimentar la paz y perspectiva que viene de conocer a Dios sin
buscarlo de forma activa. Conocer el carácter de Dios fortalece
nuestros estándares.
Busca, no Mires Alrededor,
Mientras Trabajas para Construir Paciencia
Cuando se requiere esperar pacientemente, nuestra reacción inmediata puede
ser buscar algo que ver o encerrarnos en la búsqueda de una solución más allá
de nuestro alcance de visión. Podemos encontrarnos a nosotros mismos tratando
de señalar la causa, o echar la culpa, por un periodo de silencio que Dios ha
asignado. Santiago 5:9 dice: “Hermanos, no os quejéis unos contra otros, para
que no seáis juzgados; mirad, el Juez está a las puertas.” Dejemos toda causa a
Dios, aunque no veamos la salida esperemos en silencio y confiemos en Dios, El
obrara.
La palabra “isstenazo”, en griego significa suspiro o gruñido.
Descargar nuestra enojo sobre otras personas, o incluso sobre nosotros mismos,
no va a acelerar el tiempo de Dios o a cambiar su propósito para nuestros
días... o vidas. Por el contrario, podría alejarnos de disfrutar montones de
bendiciones a lo largo del camino. A veces, simplemente se nos llama a
sentarnos tranquilos en Su presencia. En cambio, silenciamos las respuestas de
Dios y le damos volumen a la multitud que nos rodea. Busquemos escuchar a Dios
y procuremos no hacer ruidos, no escuchemos a la multitud. Seamos pacientes.
Incluso, las voces sabias ocasionalmente rinden aplicaciones y afirmaciones
inexactas. Pero en nuestra prisa por seguir moviéndonos hacia adelante, a veces
fallamos al exasperarnos o adelantarnos a no escuchar la voz de Dios. En vez de
sentarnos en silencio con él, lo suficiente para que nos guíe, corremos en la
búsqueda de soluciones tangibles con otras personas que no son de buena
influencia.
El peligro de la impaciencia es la alta probabilidad de que nos encontremos
en una cola de malas decisiones o situaciones que podrían haber sido evadidas.
Dios, en Su piedad y compasión por nosotros, nunca nos da la espalda ni
etiqueta nuestra vida por llegar “muy tarde.”
Lucha Contra el Miedo
e Impaciencia con la Confianza
Salmos 56:3-4 nos recuerda, “El día en que temo, yo en ti confío. En Dios,
cuya palabra alabo, en Dios he confiado, no temeré. ¿Qué puede hacerme el hombre?”
Cuando nuestra paciencia es puesta a prueba, podemos dejar que el temor
interfiera con nuestros intentos de perdonar. Nos puede tentar a tomar el
control de algo que justamente le pertenece a Dios. “¿Qué puede hacerme el
hombre?” Lee la voz. Nosotros también somos meros hombres y mujeres. El libre
albedrío no triunfará sobre la mano Omnipotente de Dios en el universo y su
dirección definitiva.
Santiago 1:3 dice que “Sabiendo que la prueba de vuestra fe produce
paciencia” Cuando hemos experimentado lo suficiente de la vida como para mirar
atrás las formas en que Dios nos ha ayudado, podemos descansar - incluso
experimentar - alegría desbordante. La fortaleza que construimos al pasar
tiempo con Dios nos permite someternos obedientemente a los dones y al poder
del Espíritu Santo en nosotros, incluyendo la paciencia. La voz que lee
Santiago 1:3 dice, “porque ustedes saben que, siempre que se pone a prueba la
fe, la constancia tiene una oportunidad para desarrollarse.”
Te animo y te invito a que con esta guía puedas orar por paciencia, uno de los frutos del Espíritu.
Padre Celestial, Oh!! Jehová de los Ejércitos! Mi Pastor, mi Señor!!
Te alabo por los dones del Espíritu Santo, y tu palabra viva y activa,
continuamente preparando nuestros corazones para parecernos a tu hijo, Jesús.
La paciencia no es sencilla, pero tampoco está en nosotros el crearla. Gracias
por obrar en los que no tenemos la habilidad de hacerlo. Cuando la injusticia
golpea nuestra realidad, es duro dejarte tomar el primer paso. Cuando las
personas en nuestra vida agregan más a la agravación, es difícil sumirnos al
poder del Espíritu Santo en nosotros. Quiero tomar el control y buscar soluciones.
Perdóname por permitir que sea mi
temperamento que muchas veces actúa y me lleva a defenderme y actuar. Ayúdame
Señor a saber cuando defenderme y actuar y bendíceme en esa defensa por favor
Señor.
Padre, Tú me amas a la perfección y prometes defenderme. Nos escuchas y
estás preocupado por nosotras. Ayúdanos a confiar en Ti en nuestras guerras y
afanes del día a día. Diariamente, recuérdanos sentarnos contigo y empaparnos
en la sabiduría poderosa disponible para nosotras en Tu Palabra. Ayúdanos a
recordar el Salmo 56 cuando tengamos temor. Los períodos de espera muchas veces
nos llevan al temor, y el temor puede nublar nuestra confianza y fe. Aun así,
“¿Qué nos pueden hacer unos simples mortales?” No habrá algo por lo que pasemos
que Tú no tengas la habilidad de ayudarnos. Ayúdame a ser perseverante mientras
espero. En el Nombre de Jesús.
Te animo y te invito a seguir adelante en fe, a esperar en dios aun en
nuestra situación más difícil y en los momentos que no entendemos.
La Soberana Gracia de Dios sea contigo.
Tu amiga y hermana,
Evelyn Calcaño Cepeda
SOBRE LA AUTORA
Evelin Calcaño Cepeda, creció en el evangelio, es Consejera Bíblica, del Seminario Universitario Bautista. Cuatro años de Teología en la Universidad FLET. Con Master en Educación Área Gestión Universitaria. Escritora de varios libros. Certificada en Liderazgo Económico, Dirección y Supervisión Escolar. Es parte del Equipo Directivo de la Fundación que inició en el 2007 “Fundación Viviendo Por Principios y Fe”. Ama servir y ayudar a los demás en necesidad. Una de sus pasiones es enseñar y dirigir Proyectos Educativos de Formación y Desarrollo Profesional y otra de sus pasiones es enseñar a otras mujeres. Ha escrito varios libros: Publicados en Amazon. Entre ellos: Principios para Manejar la Soledad, Como Organizar Un Ministerio de Mujeres, Guía Práctica Educativa tres series en Audio y Tres Series en Formato Escrito, Tomo I, II y II. Soltera para la Gloria de Dios. Agradecida del Señor por su Misericordia.
Comprometida con los valores:
Honestidad: “Digo lo que hago y hago lo que digo….”
Integridad: “Lealtad, Rectitud, Honradez, Inocencia”
Comentarios
Publicar un comentario