INTRODUCCION
Este es un devocional dirigido a las
mujeres para que los compartan con sus esposos y los ayuden en su caminar con
Dios y también en preocuparse en ser personas completas, hombres de Dios y
temerosos de Dios. Un hombre completo está siempre en equilibrio y aquí algunos
puntos importantes para que se mantengan en equilibrio y caminen en la
dirección de ser hombres completos.
Vivimos en un mundo roto... lleno de
promesas rotas, sueños rotos, vidas rotas. Ya nada parece "en
conjunto". Sin embargo, en medio de tal fragmentación, Dios nos invita a
experimentar la totalidad. Integridad en nuestra propia vida e integridad en
nuestras relaciones.
Como resultado, el crecimiento como personas completas es todo menos opcional. Aunque Jesús era el Hijo perfecto de Dios, de joven experimentó un crecimiento personal aparente. Este proceso, aunque todavía era el Dios-Hombre, le permitió a Jesucristo relacionarse con otros de manera muy efectiva y eficaz (Hebreos 4: 14-16).
Vemos esto de manera concisa en la descripción bíblica de Jesús como un adolescente: "Y Jesús creció en sabiduría y estatura, y en gracia para con Dios y con los hombres" (Lucas 2:52) y como un adulto soltero cuando compartía con sus discípulos y personas de posición, lo cual vemos n los evangelios.
El fue un hombre perfecto y no hizo
acepción de personas, trató con todo tipo de personas, ricas, de renombre,
pobres y enfermos y mantuvo su ministerio y testimonio, a pesar de las
contrariedades y el rechazo de muchos.
Es vital que hagamos lo mismo no importando la edad que tengamos, debemos esforzarnos en que nuestra vida sea integra, crecer en Dios mediante Su Palabra y crecer en buenas relaciones con los demás, con los que nos rodean.
VEAMOS LOS ELEMENTOS IMPORTANTES QUE
DEBEMOS TOMAR EN CUENTA PARA TRABAJAR EN NUESTRAS VIDAS Y LOGRAR EQUILIBRIO Y
SER COMPLETOS Y COMPLETAS
Psicológicamente (“en
sabiduría”)
Necesitamos ejercicio adecuado
voluntariamente. ¿Cómo? Tomando en cuenta nuestras elecciones. Ejercemos
nuestra voluntad cientos de veces al día. Algunos psicólogos dicen que nuestra
generación enfrenta el problema de la "sobrecarga de opciones". Nos
enfrentamos a demasiadas opciones. No solo debemos decidir preferencias entre
opciones, sino que también debemos hacer juicios morales entre opciones,
especialmente en las llamadas áreas grises.
Necesitamos un descanso emocional adecuado. ¿Cómo? Con un sueño reparador, teniendo tiempo con amigos, leyendo un buen libro, escuchando música edificante, teniendo tiempo tranquilo de calidad con el Señor, reduciendo la velocidad en las cosas que hacemos (si hemos estado muy acelerados en nuestro trabajo o actividades), haciendo más (si hemos sido demasiado laxos). En lugar de montar una montaña rusa en todas direcciones, busca equilibrar las demandas de la vida. Haz planes específicos para sus próximas vacaciones, incluso si es simplemente una escapada rápida.
Necesitamos una nutrición intelectual adecuada. ¿Cómo? En realidad, las Escrituras tienen mucho que decir. Despierta tu mente, renuévala, fortalécela con buena literatura, enriquécela con la Palabra de Dios, con fuentes de información veraz y actualizada (Romanos 12: 1-2). Equilibra tu mente y mantenla llena de la Palabra de Dios y con informaciones veraces y centradas en Cristo (1 Juan 4: 1-6). Hablan acerca de tener una mente discernidora (Hebreos 5:14). Cuando al hablar tenemos una mente iluminada (1 Corintios 2:12). Protege tu mente (Filipenses 4: 8). Ocupa su mente (Efesios 4:13).
Físicamente (“y
estatura”)
Necesitamos ejercicio físico adecuado.
¿Cómo? Caminar. Trotar. Correr. Golf. Jugar a la pelota. Monta tu bicicleta o
bicicleta estacionaria. Haz ejercicio con pesas. Haz ejercicio regularmente y
disfruta sintiéndote mejor.
Necesitamos descanso físico adecuado. ¿Cómo? No te exijas demasiado todo el tiempo. Duerme lo suficiente. Toma una siesta si la necesitas (incluso los atletas profesionales hacen esto cuando es necesario). Sé consistente en tus patrones de sueño; la inconsistencia te hace aún más cansado (piensa en “jet lag”).
Necesitamos una alimentación física
adecuada. ¿Cómo? Comer bien. "El hombre no vive sólo de pan". Come
muchas verduras y frutas, granos enteros y proteínas. La comida chatarra está
bien, pero solo de vez en cuando, no como una dieta constante. Sobre todo, toma
decisiones saludables. No olvides que ¡eres lo que comes!
Espiritualmente (“con Dios”)
Necesitamos ejercicio espiritual
adecuado. ¿Cómo? Poniéndote de rodillas y orando al Señor. Depende
deliberadamente de Dios para satisfacer sus necesidades. Juntate con un amigo
que está luchando en su fe. Invierte en las vidas de otros en el nombre de
Jesucristo. Comparte el amor de Dios con alguien que aún no es cristiano.
Necesitamos un descanso espiritual
adecuado. ¿Cómo? Si una disciplina espiritual en particular se siente
"seca", tómate un breve descanso. En su lugar, selecciona dos o tres
versículos de “descanso” para memorizar y reclamar como propios. Los favoritos
incluyen "Descansa en el Señor y espera pacientemente por Él" (Salmo
37:7a), "Mi alma encuentra descanso solo en Dios; mi salvación viene de él
"(Salmo 62: 1), y" El que mora en el refugio del Altísimo, descansará
a la sombra del Todopoderoso "(Salmo 91: 1).
Necesitamos una nutrición espiritual
adecuada. ¿Cómo? Leyendo la Palabra de Dios de todo corazón y pidiéndole al
Señor que te hable. Leyendo también los clásicos espirituales. Invitando a un
creyente mayor sabio y amable a que te guíe. Comunícate regularmente con un
pequeño grupo de creyentes que verdaderamente amen a Dios y se amen unos a
otros. Asiste a los servicios en una iglesia local vibrante cada fin de semana.
Socialmente ("y
hombre")
Necesitamos ejercicios sociales adecuados. ¿Cómo? Conociendo gente nueva. Haciendo nuevos amigos. Compartiendo una comida con alguien diferente. Cultivando relaciones existentes. Alentando a los amigos cercanos. Ofrecer asistencia práctica. Siendo un oído atento. Manteniendo contacto con la familia. Acercándote a alguien que está solo. Haciendo actos de bondad al azar. Planeando un viaje con varios buenos amigos. Orando por los demás por su nombre.
Necesitamos descanso social adecuado.
¿Cómo? Aprendiendo a tomar descansos. Dedicando un tiempo solo para ti.
Retirando cualquier necesidad compulsiva de estar con los demás todo el tiempo.
Aprendiendo a apreciar el tiempo para estar solo. Escribiendo en tu diario.
Escuchando una mezcla favorita de música. Aprendiendo a disfrutar meditando en
la Palabra de Dios. Tomándote un tiempo extendido para adorar y orar en
privado. Disfrutando del aire libre durante una hora.
Necesitamos una alimentación social
adecuada. ¿Cómo? Dejando de ver a todos tus amigos de la misma manera. Discierne
acerca de quiénes son tus buenos amigos. Identifica a tus amigos más cercanos.
Cultiva amistades profundas. Invita a amigos de confianza para hablar en
nuestras vidas con verdad y gracia. A su vez, anima activamente a tu mejor
amigo para que se convierta en el hombre que Dios quiere que sea.
Todos necesitamos compañerismo, compartir, rendir cuentas y también tiempo a solas con Dios.
Para
finalizar quiero repasar lo siguiente:
Efesios
5:23 y 5:28-29 Leer estas citas Bíblicas le ayudaran a centrarse en su
principal ministerio después de su comunión con Dios. La esposa y el hogar.
Comentarios
Publicar un comentario