El plan ideal de Dios para nosotras como sus mujeres, y otro aspecto de la asignación de su trabajo para nosotras, es que aprendamos de otras mujeres las “cosas buenas” de Dios. Estamos llamadas a buscar esta guía y transmitir todo lo que Dios nos ha enseñado a través del discipulado (Tito 2: 3-4).
La palabra discipulado puede recordar una variedad de
escenarios. La mayoría de las veces equiparamos el discipulado con
reuniones semanales, uno a uno, con otra mujer durante años. Eso sería
maravilloso, pero para la mayoría de las personas eso no es una realidad ni
siquiera una posibilidad. Sin embargo, podemos elegir entre algunas
alternativas enriquecedoras si realmente queremos crecer, en discipulado y en
estudios de mujeres para madurar.
Las clases son nuestras
para que las tomemos. Las iglesias de cada pueblo ofrecen estudios
bíblicos y clases bíblicas. También se ofrecen cursos por
correspondencia. Todo lo que usted y yo tenemos que hacer es inscribirnos,
hacer el trabajo y dejar que Dios nos haga crecer.
El consejo de otros
cristianos también es una forma válida de discipulado. Si tiene un
problema, pregúntele a una persona piadosa y de confianza, y recibirá la
perspectiva de Dios y el apoyo de oración que necesita. Incluso si no
puede asistir a ninguna clase o reunirse con un mentor o mentora en este
momento, siempre puede pedir consejo.
Entrevistar a otras
mujeres cristianas es uno de mis medios favoritos de crecimiento y
discipulado. Cuando Dios envió a una mujer mayor y piadosa a mi iglesia,
eché un vistazo a su ajetreada vida y vi claramente que ella nunca podría
comprometerse conmigo en una serie de sesiones de discipulado. Así que
hice una lista de todas las preguntas que quería hacerle y concerté una
cita. Nos conocimos esa vez, ¡pero esas dos preciosas horas que me dio me
cambiaron la vida! Gran parte de mi filosofía del ministerio y muchas de
las cosas que enseño son el resultado directo de ese tiempo bendito en su
presencia, bebiendo de su sabiduría.
La observación es
otro medio bíblico de crecimiento. Después de todo, "el oído que oye
y el ojo que ve, ambos los hizo el Señor" (Proverbios 20:12). ¡Así
que asegúrese de estar mirando, mirando, mirando! Observando y aprendiendo.
Es una excelente forma de aprender. De hecho, la maestra bíblica Carole
Mayhall dice que una forma de aprender a amar y demostrar respeto y apoyo a su
esposo es observar a otras mujeres. Cuando se trata de admirar a su
esposo, por ejemplo, "lleve una lista de cómo otras mujeres muestran
admiración por sus esposos". Observe, aprenda, escriba lo que aprenda
y luego pruebe esos nuevos comportamientos usted mismo.
La lectura juega un
papel importante en el crecimiento espiritual. Por supuesto, el libro
principal para leer es su Biblia. Allí encontrará la enseñanza directa de
Dios. Los libros ofrecen otra vía de crecimiento y le ayudan a desarrollar
habilidades para ministrar a las mujeres. Como autora, siempre incluyo
preguntas de estudio o tengo una guía de estudio adjunta disponible para
estudio personal, crecimiento y discipulado. Lea los libros de otras escritoras
respetadas, que nos han impreso sus programas de tutoría, sus consejos y sus
observaciones. Cuando leemos tales libros, aprendemos, maduramos y somos
discipulados y crecemos progresivamente.
Quiero reafirmar que al leer la Biblia maduramos y
crecemos y nuestro fundamento se afirma, crecemos en principios y valores. EL
leer libros de edificación y vida cristiana.
Si
no está del todo convencida, considere estos pensamientos sobre el valor de la
lectura:
La Sra. Billy Graham les dijo a sus hijas: "Sigan
leyendo y recibirán educación".
"No lea al azar; la clave más importante para la
efectividad de la lectura se puede resumir, en una palabra: la
selectividad". Decidamos con una lista aquellas áreas que queremos
fortalecer en nuestra vida, áreas como las que mencione en el estudio publicado
anteriormente, saquemos un tiempo especial de lectura, con Biblia, el libro con
el tema a estudiar, una mascota y nuestros lápices de colores, lapicero para
notas o nuestro computador para ir escribiendo el resumen y aprendizaje de nuestros
estudios.
"Una característica común a toda persona eficaz
es que son lectores ávidos".
Si estás pensando, "¡Pero no tengo tiempo para
leer!" o “No puedo agregar más citas a mi vida”, un primer paso
inteligente sería una evaluación sobria de cómo estás viviendo tu vida. Es
fácil pensar que no tienes tiempo para leer, tiempo para reflexionar o tiempo
para pasar con otras mujeres sabias. Pero el simple hecho de llevar un
libro a todas partes hace que se lean muchos libros. Solía configurar mi
temporizador y leer solo cinco minutos al día. Ese enfoque también hace
que se lean muchos libros. Y la simple observación o pedir consejo
mientras tomas un café, con determinación y humildad, te ayudará a obtener
sabiduría de las mujeres que respetas.
Como sucedió en los tiempos bíblicos, nosotras, como
mujeres, podemos sentir una falta de tiempo para todas las demandas impuestas a
nuestras vidas. Pero, ciertamente nos faltaría si descuidamos el
importante llamado a aprender de las muchas mujeres piadosas que Dios ha puesto
en nuestras vidas.
El instruirnos para crecer, requiere tiempo, dedicación,
que vayamos a la librería y adquiramos los libros necesarios para seguir enriqueciéndonos,
también lo más importante, tener un tiempo de estudio de la Biblia abordando
los temas de interés seleccionados, trabajar enfocadamente en estos estudios, y
por supuesto no dejar de orar, tener nuestro tiempo de oración de calidad para
que Dios nos bendiga en este proyecto de estudio, enriquecimiento y fortaleza a
través de este propósito.
Te animo a no desmayar, si estas desanimada, saca tu
tiempo de calidad, descansa en el Señor y que Dios prospere tu vida cada día y prospere
tus planes d estudio para madurez y crecimiento; luego veras que te animadas a
bendecir a otras mujeres a crecer y tener tus mismos propósitos.
No dejemos de animarnos, de aprender y animar a otras
mujeres a aprender también, veremos cómo en nuestro hogar crecemos y edificamos.
La Sobreabundante Gracia de Dios sea con tu vida.
Evelyn Calcaño Cepeda /Consultora Educativa, M. Ed.
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