Aunque Dios nos hizo para servir y vivir en comunidad, no significa que será fácil. Muchas veces en nuestra vida enfrentamos dificultades, sentimos oscuridad, pero aun así te ánimo y te invito a perdonar, tener tu corazón limpio, a mantener el gozo siendo llena del Espíritu Santo con alabanzas y La Palabra de Dios y a servir con amor y humildad.
Amada hermana y amiga, querida lectora, La Soberana Gracia de Dios sea con tu vida. Mientras escribo, también oro para experimentar el gozo verdadero del Señor, experimentar la disposición de servir con amor. Te invito a orar un momento pidiendo La Gracia de Dios sobre tu vida, pidiendo ser perdonada y limpiada, pidiendo un corazón para servir con humildad y amor, y que todo sea para la Gloria de Dios.
Quiero reconocer que algunas ideas que de mis estudios han sido tomadas de Ministerios en Contacto, con permiso de sus autores, previamente, ya que les he informado de que usaría algunas de sus publicaciones.
Para
sacarle el máximo provecho a este devocional, te invito a que leas los pasajes
a los que se hacen referencia.
Es importante que exploremos
lo que significa ser miembros de una comunidad, junto con las bendiciones y las
responsabilidades que conlleva. Dios nos hizo para servir y vivir en comunidad,
pero eso no significa que será fácil. Tampoco quiere decir que no lleguemos a
ser lastimadas, ya que es probable que nos fallemos unas a otras. Uso a otros.
Cuando eso suceda, puede
que nos resulte útil reducir, durante un tiempo, el número de personas que
permitamos que entren en nuestras vidas. Hacerlo nos ayudará a recuperarnos del
dolor y a seguir adelante, pero no podemos permanecer en ese estado para
siempre. El Señor nos llama a amarnos y perdonarnos los unos a los otros, como
Él lo ha hecho (Ef 4.32).
Si podemos entregarnos a
este proceso, al final estaremos dispuestos a correr riesgos de nuevo, para
compartir nuestro verdadero ser. Eso puede ser aterrador a veces, pero cuando
decidimos ser vulnerables, experimentamos las relaciones más profundas y
gratificantes que Dios quiere que disfrutemos.
PIENSE EN ESTO
·
Si usted ha sido lastimada en el pasado,
pida a un amigo de confianza que le ayude a procesar lo sucedido. Y si ha
herido a otra persona, sea valiente y ofrézcale una disculpa sincera.
·
Oremos, sirvamos con amor y humildad,
seamos discretas, andemos en Integridad.
·
Oro que seamos Mujeres Verdaderas que
Vivamos por Principios y Fe, que seamos Firmes y busquemos la Gloria de Dios,
con Gozo y Esperanza. No hay nada Imposible para Dios.
Evelyn Calcaño Cepeda
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